En este versículo, Dios aborda las consecuencias de la idolatría entre su pueblo. Al declarar que pondrá su rostro contra ellos, significa su oposición activa a quienes eligen seguir a dioses falsos. Esto no es simplemente una desaprobación pasiva, sino una acción deliberada para corregir y guiar a su pueblo de regreso al camino correcto. Convertirlos en un ejemplo y un escarnio implica que su destino servirá como advertencia para otros, resaltando la seriedad de apartarse de Dios. La separación de su pueblo subraya la distancia que el pecado crea entre la humanidad y lo divino. Esta separación no es lo que Dios desea, pero es una consecuencia necesaria de la desobediencia persistente. A través de estas acciones, Dios reafirma su identidad como el Señor, enfatizando su autoridad y la importancia de reconocer su soberanía. Este pasaje invita a la reflexión, instando a los creyentes a examinar sus propias vidas y asegurarse de que su devoción siga siendo verdadera y sin divisiones. Es un recordatorio de la naturaleza amorosa pero justa de Dios, quien anhela una relación sincera con su pueblo.
Y pondré mi rostro contra aquel varón, y le haré señal, y le haré de ruina y de escarnio; y será como un ejemplo.
Ezequiel 14:8
Faithy explica
Más de Ezequiel
Versículos relacionados
More Chapters in Ezequiel
Descubre cómo Faithy está transformando vidas
Miles de usuarios están experimentando un crecimiento espiritual diario y una conexión renovada con Dios.