Pablo comparte su testimonio de conversión, describiendo cómo Ananías le transmitió el mensaje de Dios. Ananías, un devoto seguidor de Cristo, le dice a Pablo que Dios lo ha elegido específicamente para un propósito significativo. Esta selección divina implica conocer la voluntad de Dios, ver a Jesús y escuchar Sus palabras. El término 'Justo' se refiere a Jesús, destacando Su pureza y naturaleza divina. Este encuentro marca un momento crucial en la vida de Pablo, transformándolo de perseguidor de cristianos a un apóstol devoto.
El versículo subraya el tema del llamado y propósito divinos. Asegura a los creyentes que Dios tiene un plan para cada individuo, a menudo más allá de su comprensión actual. La experiencia de Pablo ilustra cómo Dios puede usar a cualquiera, sin importar su pasado, para Sus propósitos. Anima a los cristianos a permanecer abiertos a la guía de Dios y a buscar Su voluntad en sus vidas. Este pasaje también enfatiza la importancia de la visión espiritual y la audición, sugiriendo que la verdadera comprensión proviene de un encuentro personal con Cristo.