Y si yo hubiera dado la voz, tú no me habrías oído; porque el rey había dado orden a Abisai y a Joab, diciendo: "Cuidaréis del joven Absalón por mí". Pero yo no he hecho caso de la voz del rey.

2 Samuel 18:13

Faithy explica

Un soldado se dirige a Joab, el comandante del rey David, sobre la peligrosa situación que involucra a Absalón, el hijo de David. El soldado es consciente de que hacer daño a Absalón, incluso bajo órdenes, no pasaría desapercibido para el rey David, conocido por su aguda percepción. El soldado teme las repercusiones de tal acción, temiendo que Joab no lo proteja de la ira del rey. Esta situación ilustra la tensión entre seguir órdenes y las implicaciones morales de esas órdenes. También destaca la comprensión del soldado sobre la autoridad del rey y las posibles consecuencias de la desobediencia. El versículo refleja temas más amplios de lealtad, deber y las complejidades morales que enfrentan las personas que sirven en posiciones de poder. Sirve como un recordatorio de los desafíos de equilibrar la ética personal con las demandas de la autoridad, especialmente en un contexto real donde las apuestas son altas y las consecuencias de las acciones son significativas.