En este versículo, el apóstol Pablo se dirige a los creyentes con una pregunta retórica que resalta el inmenso poder y apoyo de Dios en sus vidas. El contexto de este pasaje es una discusión más amplia sobre la seguridad de la salvación y el amor de Dios. Pablo anima a los cristianos a reflexionar sobre las implicaciones de tener a Dios de su lado. La frase "Si Dios es por nosotros" sugiere una relación profunda y personal con el Creador, quien está trabajando activamente para el bien de aquellos que lo aman.
La pregunta "¿quién contra nosotros?" no implica que los creyentes no enfrentarán oposición, sino que ninguna oposición puede tener éxito en última instancia contra la voluntad y el propósito de Dios. Esta certeza está destinada a proporcionar consuelo y valentía, recordando a los cristianos que el poder de Dios supera cualquier desafío o adversario terrenal. El versículo anima a los creyentes a vivir con confianza, sabiendo que el amor y el apoyo de Dios son inquebrantables y que Sus planes para ellos son seguros. Es un llamado a confiar en la soberanía de Dios y a encontrar paz en Sus promesas, incluso en medio de pruebas e incertidumbres.