Y le trajeron la moneda. Y les dijo: ¿De quién es esta imagen y la inscripción? Le dijeron: De César.

Marcos 12:16

Faithy explica

En un momento de enseñanza, Jesús utiliza una moneda para ilustrar una verdad más profunda sobre la naturaleza de nuestras responsabilidades. Cuando le preguntan sobre el pago de impuestos a César, Jesús solicita una moneda y pregunta sobre la imagen y la inscripción que lleva. La respuesta es sencilla: la de César. Esta respuesta establece el escenario para que Jesús transmita una lección sobre las obligaciones duales que tenemos como ciudadanos tanto de los reinos terrenales como del Reino de Dios. La moneda, marcada con la imagen de César, representa los deberes temporales que debemos a las autoridades gubernamentales. Sin embargo, el mensaje subyacente es que, como humanos creados a imagen de Dios, nuestra lealtad última es hacia Él. Jesús navega magistralmente por una pregunta potencialmente divisiva al afirmar la importancia de cumplir con los deberes cívicos mientras eleva simultáneamente el compromiso espiritual que debemos a Dios. Esta enseñanza anima a los creyentes a vivir de manera responsable en el mundo, honrando tanto las obligaciones terrenales como las divinas, y a asegurarse de que sus vidas reflejen un llamado más alto y una devoción a Dios.