El versículo relata un incidente desgarrador donde la concubina de un levita fue atacada por los hombres de Gabá, lo que llevó a su muerte. Este evento es fundamental en la narrativa de los Jueces, ilustrando la grave declinación moral y la anarquía en Israel durante este período. El testimonio del levita ante las otras tribus de Israel sirve como un llamado a la acción contra la tribu de Benjamín, a la que pertenecía Gabá. Este incidente resalta la ruptura del orden social y moral, lo que lleva a los israelitas a buscar justicia y restaurar la rectitud.
El contexto más amplio de este evento revela los peligros de una sociedad donde cada uno hace lo que le parece bien, sin considerar la ley divina o la responsabilidad comunitaria. Sirve como una advertencia sobre las consecuencias de ignorar los mandamientos de Dios y la importancia de levantarse contra la injusticia. La historia enfatiza la necesidad de unidad y acción decisiva para abordar el mal, recordándonos nuestro deber colectivo de proteger a los vulnerables y mantener la justicia.