La Pascua es una festividad significativa que conmemora la liberación de los israelitas de la esclavitud en Egipto, tal como se describe en el libro del Éxodo. Es un tiempo de recuerdo y celebración de los poderosos actos de liberación de Dios. La instrucción específica de comer pan sin levadura, también conocido como pan ázimo, tiene un significado simbólico. En los textos bíblicos, la levadura a menudo representa el pecado o la corrupción, por lo que el pan sin levadura simboliza pureza y un rompimiento con el pasado. La rápida salida de Egipto exigió que los israelitas se marcharan rápidamente, sin tiempo para que el pan fermentara, lo que explica la centralidad del pan ázimo en esta observancia.
El festival que dura siete días es un período de reflexión y gratitud por la fidelidad y provisión de Dios. Es un tiempo para recordar la relación de pacto entre Dios y su pueblo, enfatizando los temas de redención y santidad. Para los cristianos, la Pascua también anticipa la entrega definitiva a través de Jesucristo, a menudo trazando paralelismos entre el cordero pascual y Jesús como el Cordero de Dios. Esta festividad anima a los creyentes a confiar en las promesas de Dios y a vivir vidas que reflejen su santidad y gracia.