Pablo se dirige a los ancianos de la iglesia en Éfeso, reflexionando sobre su ministerio entre ellos. Les asegura que ha sido fiel en entregar el mensaje completo de la voluntad de Dios. Esto resalta la importancia de la integridad y la exhaustividad en la enseñanza y la comunicación de la fe cristiana. El ejemplo de Pablo anima a los creyentes a ser diligentes en comprender y comunicar el consejo completo de Dios, sin omitir partes difíciles o desafiantes.
Este compromiso de proclamar la voluntad total de Dios subraya el valor de una comprensión integral de las Escrituras, que equipa a los creyentes para vivir su fe plenamente. También sirve como un recordatorio de que la voluntad de Dios abarca todos los aspectos de la vida, y comprenderla requiere dedicación y apertura a Sus enseñanzas. Al abrazar el consejo completo de Dios, los creyentes pueden crecer en sabiduría y madurez, alineando sus vidas más estrechamente con Sus propósitos.